Tee Time Klever/Livgolf
Chiba, Japón – En una jornada marcada por el talento y una buena dosis de casualidad, Lucas Herbert, del equipo Ripper GC, sorprendió a todos en la Serie Internacional de Japón con una brillante ronda inaugural de 62 golpes sin bogeys, igualando el récord del campo y tomando una ventaja de dos golpes sobre el resto del field.
Pero más allá del gran score, lo que realmente capturó la atención fue su herramienta secreta: un putter de segunda mano, adquirido en una tienda mientras cenaba la semana pasada en Corea del Sur, durante su participación en LIV Golf Korea. El australiano encontró el Code 01 Forged con una cara Yes C-groove en una tienda local, y decidió llevarlo al campo. El resultado fue inmediato y demoledor.
“Simplemente me sentí cómodo desde el primer momento. A veces, las cosas menos planeadas son las que mejor funcionan”, comentó Herbert tras su ronda.
El australiano comenzó con fuerza, marcando cinco birdies y un águila en sus primeros siete hoyos. El momento más destacado fue en el hoyo 2, un par 5, donde pegó una madera 5 a 20 pies del hoyo y embocó para águila, marcando el tono de una jornada casi perfecta.
Herbert empató así el récord del campo, mostrando gran confianza sobre los greens del Caledonian Country Club, donde se disputa esta parada de la Serie Internacional presentada por Moutai, parte del calendario del Asian Tour.
El japonés Shunya Takeyasu, quien firmó una sólida tarjeta de 64 en el turno de la mañana, se mantuvo cerca, pero no pudo igualar la explosividad de Herbert.
Con su liderato, Herbert se posiciona como un fuerte contendiente en el torneo, demostrando que incluso una herramienta improvisada, en manos de un jugador con talento y determinación, puede ser la clave para lograr grandes cosas.
La historia apenas comienza en Japón, pero si algo ha quedado claro tras la primera ronda, es que Herbert está listo para competir… y su putter también.
