TeeTime Klever / Saboryestilo
Si serás anfitrión de alguna cena en esta temporada, es probable que ya estés pensando en el menú que ofrecerás. Pero también debes considerar con qué vino acompañar la cena de Navidad, es decir, el maridaje, ya que esta elección puede acentuar o restar sabor a cualquier preparación. Conoce los vinos que irán mejor con tus platillos.
Las cenas de Navidad suelen comenzar con platos ligeros como ensaladas, por lo que el vino que los acompañe también debe serlo a fin de no tornar insípidos a los platillos posteriores.

Un buen maridaje para ensaladas que lleven vinagreta puede ser un vino blanco como el Monte Xanic Chenin Colombard o un vino rosado. Si el aderezo es cremoso (por ejemplo, César, mil islas o ranch), elige un vino tinto crianza.
Si eliges un vino blanco seco, sírvelo muy frío (la temperatura adecuada para este tipo de vino es de 12 a 15°C).
Cuando se trata de vinos para acompañar quesos, hay una regla: cuanto más fuerte sea el queso, más fuerte debe ser el vino. Así, opta por un blanco para quesos suaves como el cottage, un tinto crianza para los semicurados (gouda, manchego o cheddar) y un tinto reserva para los quesos curados como el parmesano o roquefort.
Vinos ideales para pastas y cremas
En el caso de que tu pasta esté bañada en una salsa cremosa, sírvela con un pinot blanco o un chardonnay como el Louis Jadot Chablis. Para pastas con mariscos, puedes probar con un rosado como el Riunite Lambrusco Rosé.
Si el segundo tiempo de tu cena consta de una crema, el maridaje dependerá de su ingrediente principal. Cremas de verduras van bien con un sauvignon blanc; cremas de frutos secos como la nuez se saborean mejor con un blanco bourgogne y las cremas de queso, con vinos blancos de uva chenin colombard.

Vinos para acompañar carnes
La carne es de sabor más intenso, por lo que lo más recomendable es que el vino con el que la acompañes también lo sea. Al igual que con los quesos: cuanto más fuerte sea el sabor de tu carne, más fuerte debe ser el vino. Así que opta por vinos tintos como LA Cetto cabernet sauvignon, que se recomienda consumirlo a temperaturas no mayores de 16 ºC.

Para el pavo, pescados y mariscos
El mejor acompañante del pavo navideño puede ser también un vino blanco en caso de que esté relleno de verduras o frutas secas. Pero si está relleno de carne roja, sírvelo con un tinto syrah cabernet sauvignon o un tempranillo.

Pescados y mariscos maridan tradicionalmente con vinos blancos chardonnay, que también son perfectos para contrarrestar platillos salados como el bacalao a la vizcaína.
A otros platillos navideños como los romeritos también les van bien los vinos tintos con notas de chocolate.
Cierra con broche de oro…
Los vinos para acompañar postres también tienen una regla: su dulzor debe ser igual o superior al del platillo.
Si tu postre contiene frutas, acompáñalo con un vino rosado lambrusco. Si tiene chocolate dulce, compleméntalo con un tinto lambrusco; si es chocolate semiamargo, marídalo con un tinto merlot o pinot noir, y si es de chocolate amargo, combínalo con un cabernet sauvignon.
