Cada día son las empresas y organizaciones que se preocupan y actúan en apoyo y cuidado del medio ambiente, un claro ejemplo es Flor de Caña.

Tee Time Klever / Redacción

Con 130 años y 5 generaciones en historia familiar, el ron Flor de Caña es producido en Nicaragua de manera sostenible, con energía 100% renovable, añejado naturalmente en barricas de Bourbon y no contiene gluten, azúcar ni ingredientes artificiales.

Cabe mencionar que cuenta con certificado Kosher, es el único en el mundo con certificación Carbono Neutral y Fair Trade. Gracias a lo anterior y a su liderazgo en prácticas sustentables, como la siembra anual de más de 50,000 árboles desde el 2005, fue premiado como “Marca Sostenible” durante los Green Awards 2020.

Al ser la sostenibilidad uno de sus principales pilares, la marca dio a conocer la iniciativa global Zero Waste Month, la cual consistía en invitar a bares, restaurantes y bartenders de todo el mundo a unir esfuerzos para reducir el desperdicio de alimentos a través de la creación de cócteles sostenibles.

De esta manera fue que más de 30 países, de la mano de Flor de Caña, se unieron al ZWM para crear deliciosos cócteles cero desperdicio hechos con derivados de alimentos. En México fueron 31 los bartenders y centros de consumo participantes, pero 4 cautivaron a los jueces con sus propuestas, dos en la Ciudad de México y dos en Guadalajara, Jalisco.

Creatividad y talento mexicano a través de un cóctel

La coctelería en nuestro país ha destacado gracias a que ya no solo está respaldada por marcas con gran trayectoria, sino que detrás de cada barra existen mixólogos mexicanos con gran talento y pasión que, a través de sus creaciones, rompen las barreras del sabor, sorprenden a los paladares más exigentes y superan cualquier expectativa.

Tal es el caso de Luigi, Bernardo, uno de los cuatro bartenders mexicanos ganadores del Zero Waste Month, que a través del sabor, color y textura de sus cócteles, le proporcionaron personalidad y estilo a sus propuestas, además de darle un plus sostenible a las recetas de la barra, para así dejar un mensaje positivo en la industria y en los consumidores.

Para la realización de su cóctel, Luigi se inspiró en los 114 años del famoso Don The Beachcomber, el primer bar Tiki. Expresó que en esa época todo era natural y fresco, y una forma de recuperar insumos fue a través de la garnituras. 

“Con esta iniciativa logramos reducir hasta un 40% el desperdicio de alimentos en la barra. Los resultados me dejaron una gran satisfacción, así que hago extensiva la invitación a seguir reciclando y cuidando el planeta”.

Los ingredientes que utilizó para su creación fueron: ron Flor de Caña 12 Años, ron Flor de Caña Cristalino, jugo de limón fresco, jugo de naranja natural, Syrup de maple, bitter aromático hecho en casa, jugo de mango natural, gelatina de fresas con jugo de toronja natural (utilizando la cáscara de este cítrico como recipiente).

Sin duda, cada una de las propuestas cocteleras de estos talentosos bartenders estuvieron llenas de sabor, creatividad y un toque de consciencia, para convertir a este arte en una actividad emblemática de la sustentabilidad.

De esta manera Flor de Caña reconoce y aplaude la creatividad, talento y entusiasmo de los creadores de estos cócteles sostenibles, así como también lanza un mensaje de apoyo y cuidado al medio ambiente, en donde comprueba que se pueden sumar esfuerzos para combatir el desperdicio de alimentos.